Los precios del petróleo rondaron los 90 dólares el barril el viernes, camino de terminar la semana al alza, ya que los inversores optaron por centrarse en una oferta más ajustada, a pesar de la incertidumbre macroeconómica más amplia. Ambos índices de referencia petroleros alcanzaron máximos de 10 meses esta semana después de que Riad y Moscú extendieran sus recortes voluntarios de suministro de un total combinado de 1,3 millones de barriles por día (bpd) hasta fin de año.

Fuente: CNBC
Sin embargo, ambos índices de referencia terminaron ligeramente a la baja el jueves en medio de operaciones agitadas debido a múltiples señales que advertían de una demanda más débil en los próximos meses.
Los operadores que ayer obtuvieron algunas ganancias han regresado porque creen que el camino de menor resistencia definitivamente está sesgado hacia arriba, y los precios del petróleo están en camino de cerrar otra semana en territorio positivo, dijo Naeem Aslam de Zaye Capital Markets.
Es probable que a Arabia Saudita le resulte difícil poner fin a sus recortes a finales de año sin provocar una caída de precios no deseada, añadieron los analistas de Commerzbank en una nota.
Futuros del crudo Brent fue de 71 centavos a 90,63 dólares el barril, mientras que Futuros del crudo West Texas Intermediate (WTI) de EE.UU. subió 65 centavos a 87,52 dólares el barril.
Ambos índices de referencia cerraron alrededor del 2% la semana pasada -a 88,49 dólares por barril para el Brent y 85,02 dólares por barril para el WTI- en anticipación de los anuncios de recortes.
Por el lado de la demanda, China, el mayor importador de petróleo del mundo, es una gran preocupación. El país ha frustrado a los mercados debido a su lenta recuperación pospandemia, mientras que las promesas de estímulo no han estado a la altura de las expectativas.
Los datos del jueves mostraron que las exportaciones e importaciones generales en la segunda economía más grande del mundo cayeron en agosto debido a que la caída de la demanda extranjera y el débil gasto de los consumidores afectaron a las empresas.
Sin embargo, incluso en tiempos de débil actividad económica, China tiende a reforzar su capacidad de almacenamiento, especialmente con la disponibilidad de crudo ruso barato. El mes pasado, las importaciones chinas de crudo aumentaron casi un 31%.
La demanda de crudo también podría beneficiarse de la huelga de trabajadores en proyectos en Australia que producen alrededor del 5% del suministro mundial de gas natural licuado (GNL).
Mientras tanto, persisten dudas sobre si los bancos centrales de Estados Unidos y Europa continuarán con sus agresivas campañas de aumento de tasas para controlar la inflación persistente.
«Riad es muy consciente de la cuerda floja que camina entre endurecer el mercado y perturbar cualquier progreso realizado por los bancos centrales para controlar la inflación impulsada por los precios», dice John Evans, del corredor petrolero PVM.